13-11-2019

Terrible error en la desesperación por recapturar a los prófugos de la Tercera

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Tras la fuga de los once presos de la seccional Tercera, de los cuáles nueve ya fueron recapturados, se conoció la terrible situación por la que atravesaron un padre y su hijo, vecinos de la localidad de Ranelagh, a quienes la policía los confundió con dos de los evadidos.

Horas después de la fuga, ocurrida el miércoles 6, se daba por hecho que dos de los delincuentes habían sido detenidos en Ranelegh. Pero llamativamente, esa versión no se escuchó más y confundió a la prensa local que seguía de cerca los acontecimientos.

UN ERROR QUE PUDO TERMINAR MAL

Efectivamente la policía había detenido a dos personas, pero no eran los buscados. A horas de producida la fuga, un grupo de policías que se movilizaba en un auto particular, interceptó en Ranelagh a un Volkswagen Bora de color gris.

En ese auto se trasladaba un vecino que llevaba a entrenar a su hijo, a quienes le exhibieron un arma de fuego, le dispararon para amedrantarlos y los chocaron hasta hacerlo subir a la ve¬reda e impactar contra un poste.

Pero lo peor vino después: Sacaron al conductor a golpes, le rompieron el tabique de una trompada y lo tiraron al pasto esposado a la espalda. Tras la golpiza, el mal momento, y el grosero error, el hombre pudo recibir las primeras curaciones.

En tanto, el comisario Sergio Gómez, se desligó del tema y aseguró a los vecinos que “No tuvimos nada que ver. Actuó la Comisaría de Ezpeleta”.

El vecino seguramente iniciará las acciones legales correspondientes para subsanar no solo el terrible momento vivido, sino también para solucionar el arereglo de su auto chocado.